jueves, diciembre 10, 2009

Hasta aqui llegó esta aventura ...


Acaba el año 2009 y tras hacer balance de la temporada creo que es un buen momento para poner punto final a este blog que relata los inicios en el mundo del triatlón de un corredor popular.

El balance es muy positivo, en este año 2009 conseguí convertirme en finisher del IM Lanzarote, completé 2 maratones, 1 triatlón en distancia 70.3 (Elche), el triatlón de Palmaces y varias carreras divertidas como las Medias Maratones de Fuenlabrada y Mostoles.

Gran parte de las motivaciones iniciales que me sirvieron para afrontar los entrenamientos de estos meses han desaparecido, y han aparecido nuevos retos que tengo actualmente en fase de evaluación de cara a 2010.

Un saludo a todos y mucha suerte en vuestras aventuras

domingo, noviembre 22, 2009

Mi crónica del Maraton de Zaragoza, o como correr 2 maratones en 3 semanas


Unos días antes de correr en NY, mi colega Mac me convenció para acompañarle a correr el Maratón de Zaragoza. Por movidas varias se había quedado sin acompañantes para esa carrera y me pareció una buena manera de probar mi capacidad de resistencia al final de temporada ya que de mi motor diesel no esperaba gran cosa en cuanto a tiempos.

Tras 4 días de descanso total post-NY, Alejandro Santamaría me puso un plan de 10 días bastante cañero en cuanto a series pero con pocas tiradas largas. Me sorprendí a mi mismo haciendo series de 3000m a 4:40 una semana despues de un maratón pero parece que funcionó. Mi idea era salir sin objetivo de tiempo, correr y ver lo que salía.

En principio estaba pensado que fuéramos solos pero esta semana Ana y Pepa, la mujer de Mac se apiadaron de nosotros y decidieron unirse con nuestras 4 niñas para animarnos en distintos puntos.

El recorrido en Zaragoza es casi absolutamente llano e ideal para hacer buen tiempo, aunque tiene zonas en las que puede soplar bastante viento por la situación de la ciudad. Entre el km 21 y el km 36 hay 15k en los que se dan varias vueltas alrededor del Recinto de la Expo y del Parque del Agua con muy poco público, pero en general está bien organizado.

Tras cenar en un Italiano la noche anterior, nos fuimos pronto a la cama y a las 6:30 ya estábamos desayunando en la habitación. La salida era a las 9h y estaba situada a 5 min del hotel así que estuvimos casi 2h tumbados consultando el pronóstico del tiempo para esa mañana.

20 min de calentamiento y nos colocamos en la salida. Mac en el corral de 3:00 a 3:30h y yo en el de 3:30h a 4:ooh.

Salida y primeros 5km en 25 min bastante rápido pero con buenas sensaciones. Al llegar al km 10 seguía con el mismo ritmo (50 min) y empezaba a pensar que podía ser mi día ya que salía el sol, no había una sola nube en el cielo y me sentía bastante bien. Mas o menos por ese km me adelantó María Vasco, la marchadora que hizo los primeros km marchando y luego paso a correr. Bajé un poco el ritmo para asegurar, ya que dudaba si había empezado demasiado fuerte y pasé la media en 1h 49m. A partir de allí el recorrido del maratón se hacía bastante desangelado, con varias vueltas arriba-abajo por la zona de la Expo y por el Parque anexo, incluyendo cruzar el Ebro 4 veces (en el recorrido en total se cruza 7 veces). Aguanté relativamente bien hasta el km 30, por el que pasé en 2h 42m, igual que en NY, aunque desde el 26 notaba que ya no estaba igual de fresco.

Los últimos 12km fueron duros fisicamente, con sensaciones regulares a ritmo de 6 min/km y parando en los avituallamientos a estirar los isquios, que estaban como piedras. Me recuperé en el km 39, donde me esperaban Ana y mis hijas y llegué a meta en 4h 01min (otra vez que me quedo a 200m del sub 4h) , aunque muy contento por el simple hecho de haberlo acabado.

Ah, Mac se salió con 3h 16min, me alegro mucho por él: Enhorabuena!!













martes, noviembre 03, 2009

Crónica del Maratón de Nueva York 2009


40º Maratón de Nueva York (1 nov 2009)




Un año más y para celebrar el 40 aniversario de esta prueba (que nació aprox. 1 mes antes que yo) el primer domingo de Noviembre volvía a New York por 3º año para participar en su Maratón, esta vez acompañado por Ana, que se había apuntado también. Llegamos el jueves por la tarde con un tiempo lluvioso y 60% de probabilidad de lluvia para el domingo. Yo por si las moscas, me preparé para mojarme.

New York, espectacular como siempre y con un ambientazo de Maratón Internacional por toda la ciudad, con múltiples grupos de corredores de muchos países.




Esa misma tarde decidimos pasarnos por la feria del corredor para retirar los dorsales y evitar colas. Espectacular como siempre la organización y los voluntarios, así como los múltiples stands de marcas deportivas con todo tipo de gadgets. Compré unas Zoot y unas camisetas y para el hotel.









El sistema es bastante rápido. Tras comprobar tu identidad con el pasaporte lo primero es retirar el dorsal, este año daban un chip basado en una banda adhesiva que no había que devolver (ya era hora!!)






Luego se comprueba el chip, se retira la bolsa del corredor (con una camiseta técnica muy bonita) y se pasa a los stands de la feria para aprovechar el tipo de cambio Euro/US$




Había bofetadas por hacerse la foto frente a este panel con el recorrido del maratón





Al día siguiente (viernes), visita a SBR para comprobar las ofertas de sus rebajas de fin de año. Lo más interesante era el 35% de descuento en neoprenos ya que el resto de cosas no me parecieron mucho choll0.






A mediodía cruzamos a Central Park para hacer 30 min tranquilos y asegurar que todo estaba en orden. Incluimos los últimos 4 km del recorrido del maratón pero nos resistimos a hacernos la foto en la meta por aquello de la mala suerte.






Y por la noche, cena con unos amigos aprovechando la invitación del equipo de http://www.strands.com/ con la suerte de compartir mesa con 2 campeones del mundo de maratón: Abel Antón y Martín Fiz, que además de darnos muy buenos consejos nos demostraron que son unas excelentes personas. Martin preparaba la Behovia pero Abel correría al día siguiente con 4 chefs españoles (Proyecto Running Chefs)




El sábado reunión para la foto del equipo que bajo la dirección de Alejandro Santamaría http://www.trientrenos.com/ nos presentábamos en NY, todos terminamos con tiempos entre 3:40 y 4:10. Gracias Alejandro!!



Esa noche cena en Carmine´s , un italiano super-recomendable junto a Times Square y pronto al hotel a prepararlo todo, la verdad es que sin agua y sin ciclismo la preparación previa pierde mucho, pero es lo que hay.

Tras una noche de lluvia continua nos levantamos a las 5:00 am para desayunar algo y presentarnos en la recepción del Hotel Hilton, de donde saldrían los autobuses hacia Staten Island a las 6:30 am. Seguía lloviendo y tardamos más de 1 h en llegar.




Al cruzar el Puente Verrazzano dejó de llover pero seguía bastante nublado. A lo lejos el skyline de Manhattan era espectacular




Dos horitas largas de espera y nos preparamos para la salida. En mi caso en la 2ª ola, y en el de Ana en la 3ª. Todo el terreno estaba embarrado y fue difícil encontrar un hueco para tumbarnos. Como conocía el tema de años anteriores, llevé dos sacos de dormir desde Madrid y nos tumbamos en la carpa-iglesia mientras se celebraba el servicio religioso.

Y llegamos a la línea de salida. Sabía que tras subir los ca =:si 2km de cuesta inicial en el Puente Verrazzano a continuación venían casi 13km relativamente llanos y decidí apretar para ganar algo de tiempo. Este año corrían unos 44.000 corredores y era prácticamente imposible correr a ritmo sin tener que hacer slalom. Mi objetivo era pasar la media por de bajo de 1:50:00, los 30k por debajo de 2:40:00 y entrar en meta alrededor de 3:45:00


Los tiempos en los primeros controles fueron bastante estables, entre 5.10 y 5:15 min/km y las sensaciones muy buenas





Tiempos de paso
  • km 5 : 0:26:18
  • km 10: 0:52:44
  • km 15: 1:19:33


A partir del km 15 hay un par de subidas, no muy duras pero que se quedan en las piernas, bajó algo la media a 5:20 para llegar a la Media Maratón, ubicada sobre un Puente entre Brooklyn y Queens. Los avituallamientos estaban muy bien, pero había tanta aglomeración de gente que esra casi imposible no tener que parar en ellos para pillar un vaso. Además el hecho de no recibir botellas sino vasos de papel hacía imposible poder beber mientras se corría-


  • km 20: 1:46:26
  • Media : 1:52:21

Hasta aquí bien, aunque superaba en 2 min el objetivo, posteriormente 4km más o menos llanos y se llega al primer momento duro psicológicamente de la carrera: el puente de Queensborough con casi 3 km de largo y una subida continua de 1500m. Cuando llegas al final entras en Manhattan por la 1ª Avenida, repleta de animadores y enfrentas una recta de 5km hasta el Bronx muy parecida al Pº Castellana por dimensiones y perfil

  • 25km: 2:14:30
  • 30km: 2:42:59

Seguía manteniendo el diferencial de 2-3 min respecto al objetivo pero empezaba a notar una sensación muy dolorosa en los aductores, al principio era solo una molestia muscular pero cada km que pasaba se hacía más incómoda.


Al llegar al Bronx se suben otros dos puentes, uno para entrar y otro para salir enfilando la 5º avenida en la zona de Harlem. Tras ese punto se llega al 2º tramo más duro de la carrera, la subida de casi 2km hasta Central Park y los últimos 4 km de toboganes por el parque. En ese punto pensaba que todavía poder hacer sub 3:50 (tenía casi 37 min para 7 km) pero el dolor de mis piernas se hizo insoportable y pensé que algo se me rompería, solo pude mantener un rimo alrededor de 5:50 min/km. No sé si será por el dolor de patas o por haber entrenado bien pero esta vez no tuve la sensación de llegar al muro y me veía bastante entero.

Los km del 35 al 40 fueron los clave, más de 30 min para 5 km, por lo que dí por perdido el 3:50 y simplemente me concentré en el sub 4h que me parecía seguro. Corrí tranquilo los últimos 2k

La anécdota final fue que por mi Garmin los 42,2 km se cumplieron casi 400m antes de la meta real (enrealidad hice 42,6km) . Me tocó apretar los último 200m ya que pensé que por una gilipoyez podía volver a pasar de 4h pero por lo menos superé esta barrera psicológica.


  • 35 km : 3:13:28
  • 40km: 3:44:01
  • 42,6 Km: 3:58:01

Por cierto, Ana terminó en 4h 10min a tan solo 12 minutos, un gran tiempo para alguien que pensaba hacer 4:45h y que ha entrenado madrugando para salir a correr antes de las 7 am




Pensaba que esta sería mi última carrera del año pero ....



Y por si alguien se plantea correr en NY, unos consejos de la organización:


There are many challenges to running the ING New York City Marathon, from the logistics of the massive start out of Staten Island, to climbing the five bridges, to the huge cheering crowds, to "the Wall" at 20 miles, to the last 3 miles in hilly Central Park and the final sprint (or at least wobble) to the finish line at Tavern on the Green.

One Tough Course

No marathon is easy, but the ING New York City Marathon can be even tougher than most because of the course. It's not fast—don't let anyone tell you otherwise. You need to be realistic with your time goals or you will be setting yourself up for disappointment. To predict your marathon time, you would generally take your half-marathon time, multiply by two, and add 10 minutes—assuming comparable courses, weather, and training. For the ING New York City Marathon, add another five to 10 minutes to your range. For example, if you ran Grete's Great Gallop Half-Marathon in 1:30, your range for the ING New York City Marathon would be 3:10 to 3:20.

Here is what makes the course so tough:

The hills. The five bridges along the course offer uphill climbs ranging from a quarter mile to a mile followed by a downhill of roughly equal length and grade. The problem is, you lose more time on the ups than you gain on the downs. In addition, from 8 miles on there are several moderate inclines of a quarter mile to a half mile (in addition to the bridges), which tamper with your quest to stay on pace. The toughest hills aren't even the toughest. At the end of the marathon even the slightest inclines take a toll. And there are several ascents in the last 3 miles that make the going plenty tough at a time when the distance to go is enough of an obstacle. You start a moderate incline just past 110th Street on Fifth Avenue, which gradually increases until you turn into Central Park at 90th Street. The climb is relentless, and lasts almost a full mile. And there are still more hills to abuse your tiring legs in the final mile. The two long blocks up Central Park South don't look so bad to the spectators screaming at you to pick up the pace. But after more than 25 miles that moderate incline is a challenge for sure. And wouldn't you know it—the last quarter mile is up a more-than-moderate uphill. Whose idea was that?

The weather. Be prepared to adjust your clothing, pacing, and fluid intake for the weather. One thing is for sure: New York is always windy on marathon day! It is just a matter of how windy and in which direction the breezes blow. And they usually blow in gusts that swirl around the big buildings so that at times you swear you're being blown in opposite directions. If the weather forecasters claim the wind is from the north, then expect especially tough going from 2 to 15 miles and 16 to 20 miles—that is, most of the way—with a tailwind from 21 to 25 miles. And if the wind is from the south, you'll fly from 2 to 15 miles and from 16 to 20, but that headwind will be tough from 21 to 25. Most likely the wind will hit you at various angles as you wind your way through the course. That is, you can't trust it at all.

The crowds. You have two types of crowds to deal with: the millions of spectators along the course and the 44,000 athletes navigating it. Both can help and hinder your efforts. Spectators may crowd the course as they press forward to cheer on runners, they also make the course a bit longer because you can't cut perfect tangents along the way. But for the most part the throngs of screaming marathon fans will help keep you going. This makes for a faster race than if you were out in the country with just the cows looking at you. Along the course you may have to weave around runners who started too fast. And you'll have to slow at aid stations to get a clear shot at the fluids. But overall, having thousands of runners to pass—and to pull and push you—will help keep you going.

The turns. A course is measured as if you ran the shortest possible distance. That means cutting perfect tangents on each and every turn. Even if no spectators or other runners were in your way, it would be impossible to run exactly the way the precision-obsessed course certifiers go. As a result, you will—sorry—run longer than 26.2 miles. This is why some miles are longer than others. A mile—about 20 city blocks—on a straight line up First Avenue is measured almost exactly the way you run it. But a mile in Central Park is longer than a mile, because you can't exactly follow the way it is measured. The more turns in a course, the slower the course, not only because you end up running a bit longer, but also because you have to slow to make turns while you run.

The logistics. In a small race, you can show up an hour or so before the start, pick up your number, loosen up calmly, jog a little, and walk to the start line a few minutes before the start. But because of the huge numbers of participants and the complexity of the city itself, the logistics for the ING New York City Marathon are complex, and can tax your physical and emotional energy. You have to get to the expo to get your number—and if you're not careful you may spend too much time on your feet wandering around catching the excitment. This may drain you. You should therefore visit the expo early. At the start, you have to make your way to the baggage area and then to your start corral. Then you proceed to the start area and stand for about half an hour. This sure isn't an ideal warm-up, but how else can the race officials line up thousands runners from all over the world in time for a reasonably orderly start? Try to be patient. Through all the course's challenges, hang in there! Don't let the fact that New York is not a world-record course scare you away from having a great race. Enjoy the excitement and energy that make the ING New York City Marathon unique. You run New York not to run a personal record, but because it is New York—where the world comes to run! I've run the race 12 times and coached thousands of finishers of all abilities. Believe me, knowing the ING New York City Marathon course can help you plan your strategy on race day. The following description can be a big help.
Mile-By-Mile Course Tour (Note: Kilometer markers are also posted every 5K.) Segmenting the course in your mind is a great way to break it down into more manageable pieces. After all, 26.2 miles not only sounds like a long way to run—it is! So take it one borough at a time, enjoying all that New York City has to offer along the way.


The Start/Staten Island At the boom of the cannon, you are off and running—uphill. The first mile is up the incline of the Verrazano-Narrows Bridge. It actually doesn't seem that steep, as you have to start slowly due to the crowd. You are full of adrenaline, and you can't see the slope ahead of you, just a mass of runners. Think of this as a safeguard—if you had a perfect start, you would most likely sprint up the hill and waste a lot of energy that you would love to have late in the race. The second mile is all downhill. Be careful not to pick the pace up too much here or you will not only waste energy, but you could also overstride and cause an injury as you are not fully warmed up. It is best to disregard your time splits for the first 2 miles, as they are not accurate readings of your pace. Average your time for the first 2 miles for a more accurate reading.

Brooklyn From 2 to 8 miles the course is fairly flat and can be fast, depending on which way the wind is blowing. There are some slight ups and downs, but not too bad. And it is almost a perfect straight line. The Green and Blue starts merge on Fourth Avenue just before 4 miles. Until mile 8 they are to the right of the median, and the Orange start is to the left. Crossing the median is prohibited. Green and Blue start runners shouldn't attempt to pace themselves with Orange start runners—at least not until after the 8-mile mark, where all three starts merge. Use the huge Williamsburg Bank clock tower to guide you to the 8-mile mark near the Brooklyn Academy of Music. A bit past that point, you encounter a few uphills that aren't too nasty, but after running along the relatively flat sections for 6 miles they can upset your ryhthm.

From 8.5 to about 10 miles you get some nice downhills, followed by some moderate ascents over the next mile.


From 11 miles to the 20K mark it is mostly down or flat. Look forward to a nice downhill at 20K as you turn right. Then you go left, toward the Pulaski Bridge, and climb more than a quarter-mile, passing the 13-mile mark and the half-marathon mark on the way to the bridge's crest.

Queens You then zoom down the other side of the bridge into Queens. The next mile or so is mostly flat, but brace yourself for what lies ahead. You start a gradual climb at about 14.5 miles, then turn left and start the steep half-mile climb up the Queensboro Bridge. You pass the 15-mile mark soon after you start the climb. The half-mile down the other side of the bridge is tough on the legs, as it is steep and you wind sharply to the left at the steepest section at the bottom, where you cross the 16-mile mark.

Manhattan Now begins the charge through the largest and loudest crowd on the course. First Avenue is straight, but it is not flat by any means. Rather it is a series of moderate ups and downs ranging from two blocks to over a mile. Know when the downs are coming, and use them for relief and to push a bit more to make up some time. From 60th Street to 70th Street is up, then down from 70th to 74th, followed by up from 74th to 86th, down from 87th to 90th, then a flat stretch to 96th. From there begins a difficult stretch. It is uphill almost all the way to 125th Street, and then you climb almost half a mile to the top of the Willis Avenue Bridge. In addition to the uphills, the thinning crowd makes this section tough as you get farther away from the rowdy East Side bars.

Bronx Near the end of the bridge, you at last get a downhill, which takes you past the 20-mile mark. This part of any marathon can be tough. Continue down and around to the right where you have a one-block flat segment, followed by a left turn and an uphill on 138th Street. This year the course turns right onto Third Avenue/Morris Avenue, left onto 140th Street, left again onto Rider Avenue, and then right onto 138th Street and over the Madison Avenue Bridge, where you cross the 21-mile mark. Finally, you dip down, then turn left onto Fifth Avenue.

Manhattan, Again You are now—at last—headed south for Central Park! The crowds in Harlem are very loud and supportive, especially the gospel singers at the churches. The half-mile after 21 miles is flat, then slightly uphill. Don't get fooled when you see trees ahead. It's not Central Park yet, but rather Marcus Garvey Park. You go right, left, left, right around it (and the turns are not easy on the legs at this stage!), and at 22 miles return to Fifth Avenue, where you enjoy a flat-to-slightly-downhill half mile to the edge of Central Park at 110th Street. But don't get too used to it. After you cross 110th Street the route gradually ascends. The 23-mile mark is at 103rd Street, and if you're struggling, you can tell yourself that from here it is just over 5K to the finish! However, from here almost all the way to 90th Street is—sorry—uphill. Use 90th and Fifth as a mental uplift. Many local runners gather here before and after training runs, and NYRR's headquarters is nearby at 9 East 89th Street. Think of it as very friendly running territory. You cross the 24-mile mark at the Metropolitan Museum of Art, a location with a large crowd, then roll down a half-mile hill to Loeb Boat House. This is followed by a short but significant incline-nothing uphill is insignificant at this point—that carries you past the 72nd Street transverse. It's flat and slightly downhill as you approach the 25-mile mark, where you veer left to exit the park via a half-mile downhill stretch—hooray! You turn right onto Central Park South by the Plaza Hotel and go a quarter-mile slightly uphill, flanked by huge crowds. At Seventh Avenue, you get a long block downhill as you collect your energy for the final assault. At Columbus Circle, you zoom down a 100-yard stretch to the park's West Drive, then start a gradual ascent that becomes a serious climb at the 26-mile mark. But so what! You can't even see the grade. All you can see are marathoners—your fellow heroes and heroines—bordered by the massive cheering crowd. And soon all you see is that wonderful, long-awaited sight: the finish line clock. You may have felt and looked awful a few yards back, but now is the time to look great for all your fans, and for the finish-line photo that will stir memories for many years. Painful memories, for sure, but proud ones. Because conquering a marathon is a serious accomplishment. Beating the ING New York City Marathon is even more special.

jueves, septiembre 17, 2009

Se puede entrenar la Motivación?

Estoy a 6 semanas del Maratón de NY y tengo la motivación en reserva, quizás porque la mayoría de mis salidas las estoy haciendo solo y a partir del km 15 ya estoy harto de hablar conmigo mismo. No sé como era capaz hace 4 meses de entrenar 18h semanales doblando sesiones si ahora 60km semanales me dejan fundido. La bici lleva 1 mes acumulando polvo y a la piscina voy casi de paseo, necesito hacer algo ya!!

De manera recurrente visualizo los últimos 8-10 km de mis últimos maratones, esos en los que siempre pincho y no soy capaz de mantener el ritmo y empieza a entrarme el canguelo. Veo la cuesta de subida a Central Park en el 36, casi 2 km desde Harlem y pienso ... ya puedes llevar bien trabajado el tema mental, la frase mágica, el mantra o como quieras llamarlo porque allí te espera fijo el tío del mazo como los 2 últimos años, como me pasó en Madrid al subir al Retiro, etc...

Voy a ser positivo, mis tiempos en las series han mejorado mucho y qué coño!! ya soy un Iron Man, esto no puede ser más duro que Lanzarote....

martes, julio 28, 2009

Mi crónica del Triatlón de Palmaces 2009



Sábado 25 de julio

Despues de comer un plato de pasta y 2 plátanos en la habitación de un hotel rural de Atienza, me despido de Ana y las niñas que deciden quedarse en la piscina y me subo al coche camino de Palmaces (a 30 km de distancia).

Por el camino ni un alma en todo el trayecto y al llegar a Palmaces a eso de las 3 de la tarde un sol de cascar las piedras y 36º de temperatura.

En el parking me encuentro con Iñaki y subimos al Ayuntamiento para retirar los dorsales y firmar el acta. Como conocía bien el recorrido por el año pasado me subí las zapatillas y la gorra para dejarlas en el frontón del pueblo, donde está situada la T2, a 1 km de distancia de T1. Kayto, Jaime, Ruth, Noe, etc... ya están por allí con la mirada puesta en Raticulín.

Tras organizar la bici bajo un sol de justicia decido finalmente usar el casco Aero pensando en bajar algunos minutos respecto al año pasado. Me dirijo al pantano y en el camino me encuentro con Alejandro Santamaría, nuestro entrenador para NY que acabó ganando la prueba.

La entrada en T1 es rápida y tras colocar la bici me enfundo el BlueSeventy (no estaba permitido neopreno) y bajo a nadar un rato. El agua fría pero se agradecía por el calor. Salida del agua y 10 minutos esperando a que el Sr. Alcalde de Siguenza tuviera a bien dar la salida.

A diferencia del año pasado el recorrido era con giro de boyas a la izquierda. Estrenaba el garmin 310xt que permite usarse en natación, aunque los resultados que me ha dado sin algo extraños. Casi ni un roce en el agua, sorteando bien las boyas y acabé saliendo en 32 min con buenas sensaciones (casi 6 min menos que en 2008)

En la bici los primeros 5 km son algo rompepiernas con un par de repechos al 8-10%, comencé a casi 270w y decidí bajar el ritmo para no quemarme como el año pasado. Completé los 60km regulando e intentando acoplarme lo más posible haciendo alrededor de 190w medios. En la cuesta abajo final pinché el tubular trasero, pero confié en el pitstop que le había puesto por la mañana y bajé los 5 km hasta el pueblo intentando no ir a muerte. Aguantó sin problemas y al final 1h 59 incluyendo T2 que es más o menos igual que el pasado año.


Foto cortesia TriPortales



La carrera fue un poco rompepiernas y con calor como en el infierno, al km de salir me crucé con Alejandro que ya subía la cuesta para entrar en meta y con casi todos los colegas del A6: Jaime, Kayto, Ruth, Iñaki,.... con lo que más o menos me hice idea de como estaba la carrera. A los 10 minutos me dió un dolor incómodo en el costado, quizás por haber estado acoplado bastante tiempo pero se pasó cuando paré a beber agua en el 2º avituallamiento. Desde entonces fue un poco rollo, a 35 minutos por vuelta mi ritmo era de 5:15 parando a beber en todos los puntos (sin contar con echarme 2 botellas de agua por la cabeza, que gracias a Dios la repartieron fría). Me ví mucho mejor que el año pasado y bajé más de 10 minutos en este sector.

En resumen: divertida aunque cuando estás subiendo la cuesta al pueblo desde el pantano te acuerdas hasta de la madre del topo. Tiempo final 3h 44min




viernes, julio 24, 2009

A por Palmaces 2009

Llevo varias semanas de trabajo a tope, con viajes y líos varios que no me han dejado entrenar como debería. A duras penas estoy sacando 8-10 horas/semanales para entrenar pero al menos no me he desconectado totalmente tras el Iron Man, lo cual es una buena noticia.

El sábado pasado tuvimos la ya tradicional reunión de los pulilos de Jaime & Ruth: Carles Bou, Miki, Jesús el Keniata de Calahora, etc... con los que disfruté de una subida a Morcuera de las tradicionales. Mucho nivel y bastante gente preparando IMs para los próximos meses así que salía acojonao.

A pesar de bajar de 40min en la subida al Puerto, mejorando en casi 3 min mi anterior tiempo volví a ejercer de farolillo rojo del grupo, lo cual en mi caso ya no es noticia.





Y mañana Palmaces 2009 (1800/60/12) en Tierras de Guadalajara, probablemente el Triatlón más bonito de los que corrí en 2008 y que recuerdo con horror por la cuesta de subida al pueblo en la que casi me muero el año pasado. Recuerdo que fue el único momento de duda en toda la preparación del IM. Pense "si con esto estoy muerto, imaginate multiplicado por 3".
El favorito es el Super Alejandro Santamaría, recientemente patrocinado por Movistar para atacar el objetivo del Campeonato del Mundo de Hawai en 2010. Suerte Piopo :-))



viernes, junio 12, 2009

Vuelta a los entrenamientos

Despues de 3 semanas de descanso pasivo y tras darle bastantes vueltas a si cerraba o no este blog, una vez que el famoso Objetivo Lanzarote está cumplido, finalmente he decidido continuar con él y aprovecharlo para obligarme a seguir entrenando y participando en alguna prueba de vez en cuando.

Gracias a Dios mi señora es una Santa y me ha dado permiso para apuntarme a 2 pruebas este verano: El Triatlón de Palmaces (1.800-60-12) y el Triatlón de Guadalajara (3000-80-20). Mi idea es continuar con Jaime como entrenador y ver como evoluciona la segunda parte de la temporada.

Saluti

lunes, mayo 25, 2009

Mi crónica del Iron Man Lanzarote 2009

Objetivo Cumplido


Comienzo con un extracto de una crónica de Lanzarote Digital publicada hace aproximadamente una semana:

"La salida del Iron Man se dará a las 7 de la madrugada el sábado 23 de mayo en las playas de Puerto del Carmen. Espectadores, medios de comunicación y todos aquellos a quienes les gusta disfrutar de un ambiente lleno de adrenalina verán salir estos 1300 hombres y más de un centenar de mujeres desde la playa adentrándose en las aguas del océano Atlántico para nadar 3,8 Km. Lo harán en dos vueltas, recorriendo unos diez metros de playa entre ambas, permitiendo así al publico saber como van.


Terminada la segunda vuelta, pasaran por una larga zona de transición o boxes en la que irán cambiando el neopreno por el equipamiento ciclista, cogerán su bicicleta y empezaran la vuelta de 180 Km. alrededor de Lanzarote. Este recorrido ha adquirido una fama entre los fanáticos y aficionados de este deporte, por los impresionantes campos de lava de Las Montañas del Fuego o Timanfaya, sus importantes subidas por Los Valles, el Mirador de Haría y el Mirador del Río, todos ellos elementos que hacen de este recorrido un enorme reto incluso para los atletas mas duros de la especialidad.

Cuando lleguen de vuelta a Puerto del Carmen, tendrán en las piernas 180 Km. y 2551 metros de subidas, lo mas probablemente con viento, este viento tan habitual en la isla y que junto con la orografía es responsable de que este Ironman sea conocido como el Mas Duro del Mundo.
Pero en realidad, en ese momento solo habrán hecho la mitad de su acometido, ya que aun les espera un maratón completo de 42,2 Km. a lo largo de la playa de lo que fue algún día un pueblo de pescadores pero que hoy es un destino turístico de lo mas cuidado y adecuado para la practica del deporte en general y del Ironman en particular. Esta avenida de las playas de Puerto del Carmen estará ese sábado 23 de mayo lleno de espectadores, familiares, amigos, medios de comunicación y turistas de vacaciones que se pararán a animar a los corredores por los 5 Km. que ellos irán recorriendo cuatro veces en ambos sentidos. 42.2 largos kilómetros bajo el sol del mediodía para los primeros aunque para otros será ya de noche que según la dirección del viento se les puede resultar hasta fríos todo ello con el propósito final de llegar a la meta y poder apretar la mano del director de carrera Kenneth Gasque que como todos los años se quedará hasta medianoche, hora de cierre para asegurarse de poder felicitar a cada uno de los que terminan este gran evento y darles la bienvenida a la gran familia de Finishers del Ironman Lanzarote Canarias Triathlon Spain"

Día 1 Miercoles

El capítulo final de esta aventura comenzó viajando a Lanzarote el miercoles previo a la carrera. Viajamos juntos Manolo, Iñaki y yo en vuelo de Iberia, que aprovechó la coyuntura para cobrarnos un suplemento extra de 75 euros por bici (aún no he entendido por qué ya que las medidas de la maleta no pasaban los límites máximos) y encima perdieron dos de las tres en el trayecto (solo la mía llegó en condiciones).

El resto de las familias llegarían el viernes a media tarde, lo que nos dejaba 2 días completos para organizarnos y tomar contacto con los recorridos.

Ya en Lanzarote y tras tomar posesión de la casa que habíamos alquilado en Puerto Calero para la semana nos dirigimos al Club La Santa para retirar nuestros dorsales. Debo decir que la organización ha sido impecable durante todo el evento y solo puedo tener comentarios positivos para Voluntarios, Guardia Civil, etc ... que durante todo el fin de semana trabajaron a destajo para que todo estuviera perfecto.

La bolsa del Iron Man incluía una mochila, una toalla, las bolsas para las transiciones y los dorsales y pegatinas para la natación (gorro), bici y carrera. Comprobé que mi dorsal sería el 755 ya que habían clasificado a todos los participantes por orden de edad y me gustó el número.

Visita al supermercado y para casa. Esa noche cenamos pasta con atún y yo monté la cervelo mientras Manolo pensaba qué podría hacer si no aparecía su bici. Por la noche no pegué ojo, un mosquito cabrón me tuvo despierto la mitad de la noche además de dejarme un brazo lleno de picaduras.



Con Ain-Alar Juhansson, ganador en 2005 y 2006


Día 2 Jueves

Por la mañana, desayuno y tras comprar insecticida y repelente de mosquitos para todo un año, nos dirigimos a Puerto del Carmen para entrenar el recorrido de natación. En un día sin una sola ola en el mar y prácticamente sin viento completé 1 vuelta en 34:40 y confirmé que todo estaba en orden. Mac tuvo que entrenar con el neopreno de Félix ya que el suyo estaba dentro de la maleta de la bici y aún no había llegado. Coincidimos también con Ruth, Noe, Anais, Santi L, y resto de pupilos de Jaime & Ruth, todos con muy buena pinta .



Por la tarde, tras confirmar que las bicis de Mac e Iñaki habían llegado al aeropuerto (ya estábamos pensando en alquilar una) y recogerlas volvimos a subir a La Santa para la charla técnica y visitar la expo. Aproveché para llevar mi bici a Probike-La Santa y que Steven me la revisara a fondo, gracias a Dios porque a pesar de haberlo cambiado para Elche, uno de los cables del cambio estaba en mal estado.

Vuelta a Puerto Calero y salida con Mac de 15 km hasta Yaiza para comprobar que las bicis están ok. Cena con Félix (pasta con atún, un clásico) y a dormir. Por primera vez dí bastantes vueltas en la cama, dándole vueltas a lo que me esperaba en menos de 48 horas.

Por la mañana del viernes repito natación (solo 20 min) en un mar con bastante más oleaje que el día anterior y preparo las bolsas de transición. A mediodía pasamos por el aeropuerto para recoger a nuestras propias, que aparecieron por la puerta con una pancarta espectacular portada por nuestras 4 hijas. Todo un detallazo que nos transmitió muchísima energía positiva. Esa tarde me llegaron multitud de mensajes de ánimo al móvil que me dieron mucha fuerza para el día siguiente.


Y a media tarde empezó lo bueno, había que llevar las bolsas de transición y la bici a la zona de boxes, donde pasarían la noche. El proceso fue rápido y bien organizado, comenzando por las bolsas de T1 y T2 y luego por la bici. Te ves como un actor en una película, rodeado de cientos de triatletas de todo el mundo y objetivo de las miradas y comentarios curiosos de cientos de turistas.


Era espectacular ver más de 1300 bicis colocadas en paralelo en el Paseo Marítimo, y pensar en la cantidad de horas de entrenamiento realizadas para llegar hasta allí. Verme en boxes a 12 horas de la salida empezaba a acojonar, pero intentaba relajarme. Esa noche doble ración de pasta con atún, 2 plátanos y todo lo que pude meter dentro y a las 21:30h ya estaba en la cama, aunque tampoco pude dormir bien.



Día 4 Iron Man

Mi planteamiento, como siempre, era ser conservador para garantizar el objetivo principal: ser finisher. No obstante y en función de los entrenamientos previos pensaba que podía hacer la natación en 1h 10min, la bici en 6h 30 min, el Maratón en 4h 30min y con otros 20 min de transiciones acabar en 12h 30 min aprox. Al final perdí 45 min en la bici y 20 min en la carrera respecto a las previsiones. Se puede decir que me pasé de reservón en la bici y que el momento malo lo tuve del km 25 al 35 de la maratón (3ª vuelta)

Sonó diana a las 4:45 am y tras desayunar igual que siempre salimos para la zona de boxes Mac y yo, donde llegamos alrededor de las 5:30 am. Aquello era un hervidero de gente, en plena noche y con una temperatura bastante fría. Tras comprobar la bici y atender la llamada de la selva por segunda vez esa mañana (por las colas que había me imagino que no era el único así que me salí de la zona de boxes y visité el hotel Los Fariones, que para eso de poner un huevo uno es como el buitre negro, no le vale cualquier sitio), me puse el neopreno, vaselina, tapones, gorro, gafas, el chip y bajé con Manolo a la playa para tomar contacto con el agua. Aún era de noche pero se veía como el horizonte empezaba a clarear.

En la playa nos encontramos con nuestras familias que habían madrugado para vernos salir. Fue un momento muy emocionante en el que Ana me dió un beso de esos que no se olvidan. Quedaban 20 minutos para las 7 am y aún me parecía increible que yo fuera a tomar la salida. Es curioso pero en ese momento estaba seguro que acabaría la carrera relativamente entero, como así fué. 5 minutos de brazadas en el agua para ajustar bien el neopreno y para la cámara de llamadas.

Mac y yo nos colocamos justo a mitad de pelotón, en la zona de tiempo previsto inferior a 1h 05 min. La salida fue algo claustrofóbica, hombro con hombro con el triatleta contiguo. Vimos a toda la familia en las gradas y nos dimos un brazo deseándonos suerte. No se corrió hasta el agua, la gente bajaba la pendiente andando y poco a poco empezaban a nadar, lo que ayudaba a ir abriendo algunos huecos.

Tras entrar al agua me dirigí a la derecha buscando agua limpia como me recomendó Jaime y por el exterior completé la primera vuelta muy tranquilo en 36 min. Recibí algún manotazo en los giros pero nada importante, la primer mitad del recorrido se hacía en dirección este, con lo que podías disfrutar de la salida del sol. El agua estaba cristalina y se veían perfectamente los peces en el fondo. El único pero fue la zodiac de la organización, que pasó un par de veces esparciendo un desagradable olor a gasoil.

Soy el que levanta la mano saludando

La segunda vuelta de la natación, con menos gente fue algo más incómoda. El gorro era muy fino y los últimos 30 minutos pasé frío en la cabeza, al principio era molestia y al final era una sensación algo dolorosa que me hacía tener que nadar casi con toda la cabeza fuera. Según mi reloj salí del agua en 1h 12min, al ponerme de pie me sentí algo mareado y con el estómago dando vueltas, afortunadamente no tomé nada sólido en la última hora y ya había digerido el desayuno. Saludé a Ana y a la familia de Manolo y subí andando la playa hasta la zona de boxes intentando recuperarme del mareo. Tiempo oficial 1h 13min

Tras beber un vaso de agua me sentí mejor, entré en la tienda de transiciones y busqué un hueco entre triatletas cambiándose y voluntarias dando crema para el sol, había mucho lío pero todo el mundo era bastante correcto. Me puse el integral de ciclismo y las perneras blancas de 2xu pensando en protegerme del sol lo más posible. Al final fue un acierto, ya que me bajé perfecto de la bici, solo tengo quemada la nariz.

Los primeros 20km hasta coronar la primera subida a Yaiza fui muy tranquilo. A los 10km me pasó Mac acoplado y dandole duro y también pasaron a mi lado en motos Jaime, que me recordó que no abusara de watios en los continuos repechos del recorrido y usara el plato pequeño y el powertap, y Kayto, que estaba de reportero haciendo fotos acompañado de su hermana Blanca.

Cuando bajé para El Golfo empezó a llover, increible que de 2 días al año que llueve en Lanzarote nos pillara uno. Se veía subir una fila de triatletas acoplados en fila cada 7 meses por la carretera dirigiéndose hacia Timanfaya, una imagen espectacular.

La vuelta al Golfo la recuerdo muy fácil, antes de darme cuenta ya estaba llegando otra vez a Yaiza donde pasé a Felix que subía muy tranquilo. Nos saludamos y le dije que no se agobiara, pero le ví bastante seguro de cual era su carrera.

Pasar Timanfaya fue como esperaba, con viento de cara y metiéndolo todo pero no llevas ni 2 horas de bici y casi que ni te enteras, de hecho puedo decir que disfruté del impresionante paisaje de los campos de lava. A esas alturas ya me había comido un par de plátanos y medio bote pequeño de geles (tomé 2 botes pequeños con 6 geles powerbar disueltos en cada uno durante la bici) además de 2 botellas de Powerbar Endurance que llevé de Madrid y al menos 4 botellas de las que repartía la organización.

La bajada a La Santa por Tinajo fue muy fácil, aunque con fuerte viento de cara. En la subida a Soo se acercó a saludarme Mauro, un triatleta de Chicago de padres canarios al que conocía por el blog pero no personalmente. Fuimos alternandonos a ratos hasta llegar a Teguise (km 90), el primer punto donde estaba la familia, los padres Mac, Pedro, etc.... Verles al final de la rampa del pueblo fue increible, y los gritos de ánimo de mi mujer me pusieron la lágrima a punto, y eso que me considero una persona fría.

Mac en Teguise



Javier en Teguise



A la salida del pueblo empezaban los 25km realmente divertidos del recorrido con las subidas al Mirador de Haría y al Mirador del Río. Hice las subidas a unos 250w mirando el powertap y sin problemas. Si en los primeros 50km me pasó mucha gente, a partir de allí fuí yo el que pasó a más de 100 participantes, especialmente en las rampas duras. En el Mirador de Haría repartían el avituallamiento especial (km 104) y me tomé 1/2 sandwich de jamón y un botellin de coca-cola mientras hacía una parada técnica para regar unos arbustos.

La subida a Yé- Mirador del Río fue algo más dura, en un repecho del Volcán Corona ví a varios colegas que se bajaban de la bici y subían empujándola pero la verdad es que yo subí muy bien, quemé una cerilla al final a 350w y ya estaba arriba. Luego una bajada rápida y súbida final de 3 km, con unas vistas espectaculares de las Islas Graciosa, Allegranza y Montaña Clara.


Cuando llegué arriba (km 120) bajada a tope hasta Arrieta cruzándome con Anais, la novia de Noe, con la que fuí haciendo la goma los siguientes 50km hasta llegar a Puerto del Carmen. En Nazareth volví a tener animadores, mis hijas que me dieron un último empujón para subir hasta el Monumento al Campesino (km 150).


La última parte del recorrido es la más aburrida, no queda casi nadie por la carretera y cuando cambia el perfil se baja bastante rápido hasta Puerto del Carmen. Recuerdo pasar por el punto donde nos caímos en Febrero y luego ya solo concentrame en lo que me esperaba. Tiempo oficial 7h 14min






Al llegar a la T2 me ví bastante entero, y pude saludar a Ana. Sorprendentemente no me dolían nada las piernas. Me cambié completamente de ropa y pedí a una voluntaria que me diera crema solar. La zona de transición es bastante larga y estrecha, con lo que se pierden facilmente los minutos.

Cuando empecé a correr me sentí muy bien, al llegar al km 1 me encontré a Mac y a Ruth que volvían para completar su primera vuelta. Un poco más adelante me encontré a Iñaki, que me sacaba unos 5km pero las sensaciones eran buenas a pesar del calor y de lo mucho que sudaba. Me hidraté bastante en todos los puntos de avituallamiento con Coca-cola y bebida energética pero solo pude tomar 1 gel ya que el estómago me dijo que solo aceptaba líquidos y le hice caso. Fue espectacular cruzarme con los líderes tanto Bert J. como Bella o incluso con el gigante Juhansson.

Los pasos por control cada 5,5 km fueron:

1) 28:25

2) 31:22

3) 31:52

4) 32:10

Con lo que la media maratón la hice en unas 2h 03 min. Hasta allí bien pero a partir de ese momento, cuando llevaba unas 11h de carrera y solo me quedaba la segunda Media empecé a pasarlo regular, ya no me entraban los geles y tenía las piernas como palos. Dejé de cruzarme con Mac, que ya había llegado y pude ver a Ruth muy despacio con cara de ir pasándolo muy mal
Mis pasos por control en la segunda media fueron:
5) 42:53
6) 44:49
7) 40:10
8) 40:07

La segunda media fue horrible en 2h 46, con bastante tramos andando entre el km 25 y el km 35 pero cuando empezó a bajar el sol y por tanto la temperatura me sentí mejor, y de hecho completé a trote cochinero casi toda la última vuelta.

Mac completando la 2ª vuelta, me quito el sombrero con su espíritu


Pulsera roja: Fin de mi 1ª vuelta




Fin de mi 2ª vuelta

Como nos comentó Ruth, los últimos 5 km se hacen corriendo y no te explicas como, llevas las 3 pulseras (roja-1ª vuelta, azul-2ª vuelta y amarilla-3ª vuelta) y ya solo piensas en llegar y saludar a Kenneth. Los últimos 200m son la leche, entre aplausos del público y sabiendo que has sido capaz, no ya de superar la carrera sino el reto del entrenamiento a lo largo de más de 16 meses. Tiempo final 13h 48min, puesto 861 de 1.349, 218 de 349 en mi categoría de edad.

Enhorabuena de Kenneth: Objetivo Cumplido!!

Epílogo
Todos aquellos que habéis seguido este blog desde enero de 2008 sabéis que cuando empecé esta aventura casi no era capaz de nadar 50m seguidos y hacía casi 20 años que no me subía a una bicicleta. Las navidades de 2007 me trajeron una Mountain Bike y con el apoyo de un grupo de amigos y mucha ilusión pasé de leer historias de personas normales que se convertían en Iron Man a protagonizar una de ellas.
El camino ha sido muy duro, lleno de renuncias y de momentos de prueba pero cuando llegas al final y miras para atrás te das cuenta del verdadero valor de esta aventura. Nunca olvidaré que cuando me apunté aún no estaba seguro de si era capaz de nadar casi 4km en el mar, o de poder aguantar 6-7 horas encima de una bici, por lo que la reflexión que haría es que lo verdaderamente interesante es el camino hasta la línea de salida, y la confianza que ganas en tí mismo en ese proceso.
Sin duda la persona más importante para llegar hasta aquí ha sido mi mujer, que en todo momento me apoyó para proporcionarme el bien más escaso pero imprescindible para afrontar un reto de estas características: tiempo. Mi medalla de finisher es para ella y para mis hijas.
Mis compañeros del A6 también tienen parte de la culpa ya que sin duda este camino se habría hecho mucho más duro en solitario. Debo dar las gracias especialmente a nuestro entrenador: Jaime Menéndez de Luarca, que se hizo cargo de un grupo de ejecutivos domingueros y los llevó a todos a la meta de Puerto del Carmen (lo de K simplemente ha sido un retraso de unas semanas por su lesión)
Patrocinadores, amigos, familiares, compañeros de trabajo.... todos han puesto su grano de arena para permitirme llegar hasta aquí y a todos quiero recordar con mi máximo agradecimiento.

A partir de mañana nos pondremos a buscar un nuevo reto, aún no sé cual será aunque ya estoy apuntado para mi 8º maratón, que será por 3ª año consecutivo el Maratón de Nueva York. ¿Alguna sugerencia?
Un fuerte abrazo a todo@s
Puerto Calero-Lanzarote
26 de mayo de 2009